Estaba con mi familia en unas vacaciones en España. O en Monterrey de noche. Había unas vaporeras gigantescas con comida, casi como en el de la panadería de noche y la quinceañera rara. Y luego un baile de disfraces, la verdad no recuerdo muy bien. Pero de que estaban ahí mi mamá, mi hermano y mi papá, estaban.
Luego me encontraba súbitamente durmiendo en la habitación, ordenada tal y como está ahora. Pero tenía miedo porque creía que los muebles habían sido movidos por un fantasma. Que mi habitación estaba poseída por el espíritu del fenómeno Poltergeist. Rezaba con miedo. Después, fui despertada por el ruido de la regadera. Angie se estaba bañando y cuando salió, seguía Martha y le decía que me diera chance, que ya eran las 9 y a esa hora entraba, pero ella hacía la cara como de que no me iba a dejar. Las maldije en mi interior. Me acordé que no, que entraba a trabajar a las 8, peor aún. Sonaba mi celular, era mi jefe. Me arreglaba furiosamente, y cuando iba a recoger algo al primer cuarto de los de atrás de la casa de mi abuelita, estaban Valdemar y una que supuestamente era su novia, teniendo relaciones de pie junto a la pared. No sé si habrán visto que los vi, pero me pasó por la mente quedarme a ver qué pasaba. Recordé que se me hacía tarde y salí corriendo, toda gordita como soy, por el pasillo.
jueves, 7 de abril de 2011
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