viernes, 25 de marzo de 2011
Pasaba en la escuela de música o de enfermería o de medicina
Teníamos que hacer una línea gigantesca. Yo tenía mi mochila con la lap y otras cosas y debíamos declararlas para que nos dieran un bono o algo así. También había jardines preciosos, pero el lugar donde estábamos era como un hospital o una escuela de algo. Había cuatro mesas, o tres, y en una de ellas estaba mi tía rosa. La fila era muy larga, y yo ya había llegado a la mesa y empezaba a mostrar mis cosas para obtener el dichoso bono, cuando hubo una emergencia, no me preguntes cuál y salí corriendo dejando todo ahí. Cuando regresé no había nadie. Fui a una especie de El Consejo, a ver si habían puesto por caridad de Dios ahí mis cosas en las cosas perdidas, pero sólo estaba la lap. Ah!, la lap!. Tenía un mensaje que decía: "creemos que al menos esto es algo de valor, firma los cochinitos de pan, o jehú y demás amigos delgaditos". Ok. Fui de salón en salón, gigantísimos, a buscar las libretas y las otras cosas y encontré en un pequeño auditorio bastante bien iluminado una clase de música. Parecía uno de esos salones de las universidades de Estados Unidos donde dan cátedra. Y había un maestro, yo abría la boca y sacaba sonidos, y él me señalaba una mesa con una tabla abajo donde se habían juntado las cosas perdidas. Toda eran mías y estaban dispersas.
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